Un total de 310 migrantes venezolanos -174 adultos y 136 niños, niñas y adolescentes- han sido trasladados a Santiago para la reunificación familiar, gracias a un coordinado trabajo entre la Delegación Presidencial Regional de Tarapacá, el Obispado de Iquique, la Iglesia San Antonio de Padúa, Caritas Chile, la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días y Carabineros.
Esta semana partieron dos buses rumbo a Santiago con familias que tras permanecer días o semanas en Iquique en condiciones no ideales, “sobreviviendo” en plazas o el borde costero, fueron catastradas por funcionarios de la delegación y partieron al reencuentro familiar, cumpliendo previamente con todo el tema sanitario y chequeando además la existencia de ese vínculo familiar.
Para el delegado presidencial (s) Natan Olivos este quinto proceso de reunificación familiar, se trasladaron desde Iquique a Santiago a 67 personas -43 adultos y 24 menores- “y a la fecha llevamos 310 personas en este proceso de reunificación familiar que estamos haciendo directamente como coordinación de la Delegación Presidencial Regional. Esperamos seguir en este proceso para que más familias migrantes puedan llegar a su destino y cumplir con estos procesos de reunificación familiar”.
Los primeros tres traslados se realizaron gracias a la Empresa Pullman Bus que asumió esa función humanitaria sin costo alguno para los migrantes y ahora se cuenta con el aporte de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días que asumió el costo de 10 buses.