Hace 44 años atrás, en el seno de la Sede Iquique de la Universidad de Chile, hoy Universidad Arturo Prat, bajo la dirección del profesor Iván Vera-Pinto Soto, nació esta prestigiosa y longeva compañía artística. Pues, aquí, tal como en otras universidades del país, surge la extraña paradoja: por una parte, el teatro que se hacía antes del quiebre institucional democrática era denostado por las autoridades gubernamentales, mientras que por otra estas mismas estructuras – en este caso educacionales – se servían de este arte para cumplir con una de las tres funciones esenciales del quehacer universitario (la extensión cultural) y para educar a un estamento estudiantil que demandaba de espacios para expresar sus inquietudes e ideas.
Han pasado muchas estaciones, hoy el Teatro Expresión ha logrado estabilizarse, superando escollos de toda índole, bajo parámetros de estricta labor profesional, sin perder de vista los principios primarios establecidos en su fundación. A saber, primero, centralizado en la universidad, con una capacidad de establecer instancias formativas y de perfeccionamiento, mediante la realización de cursos, seminarios y talleres, cuyos destinatarios han sido los estudiantes y los distintos segmentos sociales de esta comunidad; segundo, orientado hacia una apuesta escénica valórica, conceptual, comprometida y asociada a los intereses y demandas del público local; complementada con la generación de productos artísticos con identidad regional. Tercero, encauzado en una labor permanente y sistemática, patrocinada por esta Casa de Estudios Superiores.
Está claro que para que el teatro nazca, se mantenga o resurja no basta un decreto de la autoridad superior, se requiere de la presencia de otras variables sustanciales: liderazgo, capacidad de trabajo en equipo, disciplina, perseverancia, soporte ideológico sólido y pasión.
Otro aspecto digno de análisis es el hecho que el teatro es por esencia un fenómeno social que refleja e influye en la realidad objetiva que la sustenta. Por ende, la historia de esta entidad y de su producción la debemos entender como el resultado de cambios de mentalidades, concurrencia de diferentes paradigmas, demandas, aspiraciones, intereses, emociones, crisis y tensiones acumuladas por un extenso período de trabajo tesonero.
Soslayando todas las dificultades, esta compañía emprendió la aventura escénica el domingo 6 de julio de 1980, a las 20.00 horas, en la Sala Veteranos del 79. En esa oportunidad, el elenco hizo su debut con dos obras “El último tren” de Isidora Aguirre y “Castillos en el aire”, de autor anónimo. De ahí para adelante, se han montado más de cien obras, giras nacionales e internacionales, encuentros y festivales teatrales en diversas latitudes, cursos y talleres, publicaciones, la conformación de una Academia de Teatro de Adulto Mayores y la fundación de una Mancomunal Teatral Iberoamericana, han sido algunos de los tantos hitos alcanzado durante toda su historia.
Por sobre todos los antecedentes y logros que este colectivo ha alcanzado, se puede apreciar tres temáticas que han recorrido su poética y repertorio: identidad, memoria y crítica social. Quizás, sean estos los elementos fundamentales, los que le han permitido contar con el respaldo emocional del público el que, fielmente, ha seguido su periplo, cuyo fondo es la continuidad del histórico teatro social iquiqueño.
Precisamente, con el fin de recordar con alegría la historia vivida, se ha articulado para el día viernes 8 del presente, a las 20.00 horas un programa especial, el cual contará con la participación de varias organizaciones pampinas, quienes pretenden revivir el espíritu de las antiguas veladas, aquellas que en antaño se hacían en la antigua casona de los ex Veteranos de la Guerra del Pacífico, como también en muchos salones salitreros.
A las 10.30 horas, con la asistencia de los niños y niñas del Jardín Infantil “El morrito”, la actriz Patricia Torres interpretará “Ernestita, cuenta y encanta”; también estarán los títeres de la abuelita Yolanda, juego de participación infantil “Pintando la pampa”; finalmente, se interpretará un cuento del caserón teatral.
En la noche, a las 20.00 horas, se llevará a cabo la inauguración de la exposición “La voz de la pampa”, a cargo de la Diseñadora de Vestuarios Jeannette Baeza Rivero; “Memoria Teatral” con el profesor Iván Vera-Pinto; intervención del cantautor Patricio Leyton; poesía y añoranza con Jennifer Arriagada; “Juegos en la pampa” con Carolina Silva y Eliel Arriagada. Y, a las 21.00 horas, como broche de oro, se vuelve a levantar el telón para la exitosa obra “Latidos bajo la chusca”. Entrada Liberada.