Luego de cerca de dos años de trabajo, el centro ha permitido la atención de 1.800 aves silvestres con un 95% de reinserción en su hábitat.
El Centro de Rehabilitación de Golondrinas de Mar (CEREGO), tiene por objetivo recibir a las conocidas Golondrinas de Mar que caen o se ven afectadas en faenas mineras y localidades de la región de Tarapacá afectadas por las luminarias artificiales u otras causas, entregándoles una atención veterinaria de calidad para luego poder reinsertarlas en vida silvestre.
Esa semana logró una nueva liberación de dos aves conocidas como Huairavos, ambos ejemplares juveniles que fueron entregados por el SAG al centro luego de ser encontrados por particulares en la vía pública. Luego de ser examinados por la veterinaria, doctora Patricia Rivera, se decidió dejarlos en rehabilitación por un par de semanas, ya que uno de los especímenes aún tenía sus plumas de vuelo en crecimiento. Por otro lado, la segunda ave juvenil, necesitaba desarrollar aptitudes propias de su especie, logrando un trabajo colaborativo con la doctora veterinaria Nicol Munizaga de Terra Viva, quién facilitó parte de sus instalaciones para entregar un espacio mayor a las aves para que pudieran desenvolverse tranquilamente a la espera de su liberación. Cabe recordar que estas aves son especies nativas de nuestro país, por lo que se encuentran protegidas para promover su cuidado y conservación.
La veterinaria a cargo de la liberación, Patricia Rivera, explicó que la presencia de animales y aves silvestres en el territorio, hasta donde ha llegado la comunidad permite entender lo importante de “coexistir, respetando su entorno, aprendiendo y respetando su naturaleza, y entendiendo que su existencia incluso beneficia la nuestra es la única forma de poder mantener un equilibrio ecológico. Al cuidar su hábitat, cuidamos el nuestro”.
El centro, que nació en agosto de 2022, ha recibido cerca de 1.800 aves, en su mayoría golondrinas de Mar Negra, seguido de Golondrinas de Mar de Collar, Huairavos, Pequén, Taguas del Norte, Yuncos, Picaflor del Norte, Gallina Ciega, Gaviotines sudamericanos y otras especies de aves derivadas por el SAG, logrando la liberación y reinserción en su hábitat del 95% de las aves ingresadas y está compuesto por un equipo de colaboradores capacitados que participan en el traslado y rescate de las aves, liderados por su director Fernando Solar y la médico veterinaria Patricia Rivera Vega.