• sábado, 21 diciembre 2024 09:45

Culminan obras de emergencia en Monumento Histórico Hospital de Pisagua

Dic 19, 2024
• Trabajos de aplome y consolidación, diseñados por profesionales de la Secretaría Técnica del Consejo de Monumentos Nacionales, buscan asegurar el desempeño estructural del edificio de dos plantas, para garantizar su conservación a la espera de un proyecto de recuperación definitivo
Después de 130 días de ejecución, esta semana culminaron las obras de emergencia que se realizaron en el Monumento Histórico Hospital de Pisagua, las cuales fueron diseñadas por el equipo multidisciplinario del Área de Patrimonio en Riesgo de la Secretaría Técnica del Consejo de Monumentos Nacionales, dependiente del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural. Hoy el edificio de dos plantas, construido con pino oregón en 1908, logró recuperar la verticalidad que había perdido a lo largo de los años, para asegurar de este modo su conservación a la espera de un proyecto de recuperación integral y definitivo.
Construido en base a ensambles, fachada con columnas y una amplia escalera de acceso, además del desgaste superficial, el Monumento –declarado como tal en 1990- presentaba severos daños de asentamiento local en el acceso del edificio, deformación de la viga del pórtico interior, una grieta en el muro de contención y hundimiento del pasillo, desconexión de una solera del pie derecho e intervenciones posteriores. Pero el daño más evidente y de mayor gravedad era la inclinación lateral del primer piso: la deformación alcanzaba un 12% en el centro del edificio y 3% en los extremos.
“La declaratoria del Hospital de Pisagua como patrimonio responde a su riqueza arquitectónica y al rol fundamental que cumplió en el ámbito de la salud en su época. Su conservación es imprescindible, porque cuando un patrimonio está en riesgo, no es solo ese lugar el que sufre: es todo Chile el que pierde una parte de su identidad. Obras de emergencia como esta reflejan el compromiso del Estado para proteger y mantener vivos nuestros patrimonios, asegurando que sigan siendo testimonio de su valor histórico y cultural, tanto para el presente como para las generaciones futuras”, dijo la subsecretaria del Patrimonio Cultural y presidenta del CMN, Carolina Pérez Dattari.
El objetivo era otorgar un desempeño estructural seguro al monumento, eliminar la deformación existente y así reducir la vulnerabilidad asociada a la inclinación del edificio. Los trabajos, que tuvieron un costo de más de 150 millones de pesos –financiados por el CMN- consistieron en “jalar” el edificio para volverlo a su centro, instalando una estructura auxiliar interior, con marcos de acero móviles fundados sobre vigas de hormigón armado, con altura variable para adaptarse al desplazamiento del edificio. Posteriormente esa estructura se modificó para restringir su movilidad y se utilizaron anclajes a las vigas del entrepiso.
“Este trabajo en el Hospital de Pisagua refleja nuestro compromiso con la protección y conservación del patrimonio nacional. La intervención, liderada por los profesionales de la Secretaría Técnica del Consejo de Monumentos Nacionales, no solo ha permitido estabilizar una estructura que estaba en riesgo de colapso, sino también asegurar que este Monumento Histórico siga siendo un testimonio vivo de nuestra historia y memoria colectiva. Continuaremos impulsando estas acciones para resguardar el patrimonio cultural de nuestro país, garantizando su preservación para las futuras generaciones”, dijo la directora del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural, Nélida Pozo.
«Para la región es una gran noticia el fin de estos trabajos y luego de revisar en terreno los avances, estamos felices de poder dar un paso más en la vía de ir protegiendo nuestros inmuebles patrimoniales, algo que es una preocupación de la comunidad, no solo de Pisagua, sino que de toda la región», puntualizó el director regional del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural, José Barraza.
El Hospital de Pisagua es uno de una serie de Monumentos Históricos de la localidad de 300 habitantes, como el Teatro Municipal, la escuela, la torre del reloj o la iglesia, vestigios de la época de bonanza económica por el salitre. Los movimientos telúricos, incluido el terremoto de 2005, y el implacable paso del tiempo, generaron graves daños al edificio, que, pese a ser edificado como un inmueble de prestancia, fue fundado en una superficie rellena con material de poca solidez, por lo que su base se hundió.