• Participaron representantes de ocho comunidades de la comuna de Colchane. La actividad se realizó en el contexto de los Planes de Revitalización Cultural Indígena de la Subdirección de Pueblos Originarios del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural.
Una muestra de textilería en fibra de alpaca y en fibra vegetal, además de relatos sobre la historia de los sikuris y de la bandola aymara en el floreo de llamas, fueron algunas de las practicas ancestrales que compartieron los cultores de la comuna de Colchane durante la jornada de expresión cultural, convocada por la mesa territorial “Aymaras en Acción”.
El objetivo de esta actividad, que se realizó en el marco de los Planes de Revitalización Cultural Indígena que desarrolla la Subdirección de Pueblos Originarios del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural, fue intercambiar experiencias y conocimientos ancestrales de la cosmovisión aymara, según explicó el director regional de patrimonio cultural, Manuel Pedreros Reyes.
“Fue una jornada de transmisión de saberes, donde hubo un interesante intercambio entre cultores de estas comunidades, asociados a saberes en el ámbito de la textilería, de la música, de la gastronomía, con mucha presencia de jóvenes, de niños, y que justamente el objetivo es que estas tradiciones vayan pasando desde una generación a otra”, agregó.
En esta oportunidad, participaron comunidades representantes de Enquelga, Huaytane, Quebe, Mauque, Central Citane, Chulluncane, Ancuaque y Villablanca. Durante la jornada, que se llevó a cabo en Alto Hospicio, también realizaron una muestra de música tradicional aymara, preparación y degustación de la mucuna y carne de llamo, preparación del “te con te” (bebida preparada con hierbas del altiplano y pusitunga), además de una exposición de textilería en fibra de alpaca y fibra vegetal.
En tanto, el presidente de la mesa territorial “Aymaras en acción”, Rafael Mamani Amaro, comentó que la jornada de transmisión de saberes fue un éxito, debido a la alta participación de jóvenes. “Estamos en un mundo globalizado, muchos ya estamos en las urbes, y el rescatar, el preservar y difundir (estas costumbres) es una tarea bastante grande. Nosotros estamos transmitiendo lo que rescatamos en nuestra vivencia, estamos transmitiendo para que nuestros hijos, los jóvenes, también puedan ser los transmisores de nuestra cultura”.
Por su parte, la representante de la comunidad Ancuaque, Angélica Mamani, artesana tradicional aymara en fibra vegetal, explicó que este tipo de jornadas son relevantes para que los saberes ancestrales heredados por sus abuelas continúen en el tiempo.
“Hoy en día, ya sea por trabajo o estudio, nos hemos venido a Alto Hospicio y nuestros niños están acá, por eso también decidimos realizarlo acá (…) Nos hemos emocionado bastante porque nuestros hijos están emocionados y están participando. De esa manera, creo que es muy positivo y debiéramos seguir realizando estos encuentros para preservar nuestra cultura aymara”, sostuvo la artesana.