El convenio interministerial contempla la instalación de dispensadores de preservativos masculinos y femeninos en universidades y centros de formación técnica.
La iniciativa permitirá también capacitar a estudiantes de carreras de la salud y del área psicosocial para que participen de un programa de prevención, siendo monitores y monitoras para la toma de test rápidos y entreguen consejería.
La ministra de Salud, María Begoña Yarza, junto al ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, la subsecretaria de Educación Superior, Verónica Figueroa Huencho, y el subsecretario de Salud Pública, Cristóbal Cuadrado, firmaron un convenio que persigue la promoción del sexo seguro en los estudiantes de la educación superior y la promoción y el control del VIH/SIDA y las infecciones de transmisión sexual.
El convenio, cuya firma tuvo lugar en la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación (UMCE) donde estuvo presente su rectora, Elisa Araya, consiste en la instalación, en las universidades públicas y en todas las instituciones de educación superior que deseen adherir a este programa, de dispensadores de preservativos masculinos y femeninos, lubricantes y distintas acciones preventivas para aportar en la disminución de las conductas sexuales inseguras.
Además, el acuerdo contempla la capacitación de estudiantes de carreras de la salud y del área psicosocial para participar en el Programa para la Promoción del Sexo Seguro y Prevención del VIH desde un enfoque de educación sexual integral. Lo que se suma a capacitaciones para que las y los estudiantes sean monitores de VIH/ITS, puedan realizar test rápidos de detección de VIH y entregar consejería a quienes lo necesiten.
El ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, explicó que “con la firma de este convenio venimos a ratificar la vinculación de los ministerios de Salud y Educación. Hoy es esencial avanzar en acciones preventivas que le permitan al Estado llegar a los ciudadanos y ciudadanas, qué mejor que hacerlo partiendo por la educación superior para implementar estas acciones. Es fundamental comprender que esto se enmarca en la futura Política Nacional de Educación en Afectividad y Sexualidad Integral, porque se hace necesario tener medidas preventivas de salud, pero también educar a las y los estudiantes, dado que la afectividad y la sexualidad son componentes esenciales de nosotros como seres humanos integrales”.
En ese sentido, la ministra de Salud, María Begoña Yarza, afirmó que este convenio “es la consolidación de un trabajo de nuestros equipos técnicos de ambos ministerios en función de instalar los temas de prevención y promoción de salud. Estos dos ministerios tenemos muchas cosas en común, nosotros creemos a la educación salud, creemos que es un gran instrumento para mejorar las conductas, tener menos riesgos y cuidarnos más. Este convenio, que se inicia hoy en esta universidad, es significativo porque además esta es una universidad que forma formadores, y por tanto, un convenio como este y una conversación preventiva y promocional como ésta va a ser amplificada a todo el país»
Por su parte, la subsecretaria de Educación Superior, Verónica Figueroa Huencho, detalló que “las y los estudiantes de educación superior son clave en prevenir y asegurar que la sexualidad se dé en entornos seguros, favorecer el autocuidado, la conversación y el diálogo, y seguiremos avanzando de manera sostenida en que esta sea una política pública necesaria de implementar en nuestro país”.
Y el subsecretario de Salud Pública, Cristóbal Cuadrado, añadió que “la salud se genera en todos los lugares donde convivimos. Por eso necesitamos entornos que sean saludables, y parte de eso tiene que ver con cómo como generamos espacios en lugares educativos y de trabajo que ayuden a que nos mantengamos saludables. La prevención es fundamental”.
Asimismo, la rectora de la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación, Elisa Araya, dijo que “nuevamente, las universidades estatales nos hemos puesto a disposición de un trabajo colaborativo con el Estado. Esta vez como un espacio para la generación de estrategias que promuevan la educación sexual integral y responsable para adolescentes y jóvenes con enfoque de diversidad, género y no discriminación. Este convenio brindará nuevas herramientas a la formación integral docente y profesional de nuestros y nuestras estudiantes. Somos una universidad esencialmente pedagógica, por lo que es fundamental que los futuros educadores y educadoras se acerquen a estos temas, porque van a tener que hacer un modelaje con sus propios estudiantes más adelante”.