• Desde el año 2023 la DT ha abierto en el mundo sindical espacios de conversación y análisis respecto de este tema.
Tres investigaciones que abordan desde distintos ángulos las posibilidades de la negociación colectiva multinivel o ramal en Chile lanzó este martes la Dirección del Trabajo (DT).
Este tipo de negociaciones -existente en otras naciones, especialmente europeas- excede el marco de las empresas y es llevado a cabo por organizaciones empresariales y sindicales de un mismo sector productivo.
La actividad se realizó en la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) y contó con una presencia superior a los 300 dirigentes y dirigentas sindicales. El lanzamiento fue encabezado por el director del Trabajo, Pablo Zenteno; la subdirectora del Trabajo, Laura Vásquez, y el presidente de la CUT, David Acuña.
La autoridad fiscalizadora recordó que desde el año 2022 el Gobierno ha impulsado una discusión sobre un futuro proyecto de ley acerca de la negociación colectiva multinivel.
En este contexto, dijo esperar que “estos estudios permitan entregar insumos y elementos objetivos para un análisis, porque muchas veces es una discusión que está permeada de ciertos sesgos, de cierta información que no es correcta a la hora de analizar cómo funcionan los distintos sistemas de relaciones laborales en el mundo”.
Consultado sobre las experiencias de negociaciones multinivel aplicadas en países desarrollados, Zenteno explicó que “son modelos que están muy arraigados en dichos países y, por lo tanto, dan cuenta de que es posible tener espacios de ejercicio de los derechos colectivos mucho más expansivos, al alero también de los convenios internacionales y que también redundan en mayor equidad, productividad y crecimiento económico”.
El presidente de la CUT, en tanto, defendió las virtudes de este tipo de negociación afirmando que “permite generar equidad dentro de las distintas empresas”, dado que actualmente en el país “lamentablemente no existe esta cobertura de negociación colectiva que hay en otros países, porque en Chile la negociación colectiva está limitada a la empresa y creemos que debemos llevar esta discusión a los sectores económicos, donde hoy ellos están vastamente organizados a través de las distintas ramas de la CPC”.
En esa línea, informó “hemos hecho un llamado también a los empresarios, lo hemos conversado y planteado incluso dentro del Consejo Superior Laboral (del Ministerio del Trabajo) para que tengamos esta conversación, para que podamos tener este diálogo; esperamos tener su visión en torno a esta demanda de los trabajadores y los llamamos a que no tengan miedo, a conversar, a dialogar porque en Chile se avanza y se ha avanzado con diálogo”.
DT promueve reflexión ramal
Desde el año 2023 la DT ha abierto espacios de conversación y análisis respecto de este tema en el mundo sindical.
Así, el año pasado realizó cuatro talleres ramales en el comercio, minería, industria y banca, tres en la Región Metropolitana y el restante en la de Valparaíso, con participación de 282 dirigentes y dirigentas sindicales que conocieron este tipo de negociaciones. Este año se realizarán talleres similares en otras regiones y enfocados en otros sectores económicos.
Este año, con la publicación de estos tres estudios la DT avanza en la reflexión de un tema relevante para el mundo del trabajo.
Gonzalo Tassara, jefe del Departamento de Estudios, explicó que la intención “es apoyar la elaboración de políticas públicas basadas en evidencia, además de aportar conocimientos y reflexiones respecto de nuestro sistema de relaciones laborales. Esperamos que estos documentos estimulen el debate informado sobre los desafíos y perspectivas de la negociación colectiva multinivel en Chile”.
Discusión pública
El documento “La discusión pública sobre negociación ramal en Chile, 2014-2022. Actores involucrados, posiciones y argumentos» fue elaborado por Sebastián Osorio, Monserrat Greene y Alejandro Salinas.
El estudio analiza el debate público sobre la negociación colectiva ramal en Chile entre 2014 y 2022. A través de un análisis de 706 artículos de prensa, se codificaron 474 referencias de posicionamientos, clasificándolos según el actor (empresarios, sindicalistas, políticos y expertos), el ámbito temático (efectos sobre trabajadores, sobre empresarios, económicos y rol del Estado) y si eran favorables, neutrales o contrarios a la negociación ramal.
La discusión centró en los ciclos de tramitación de la Reforma Laboral de 2016 y del proceso constituyente de 2021-2022. Provino de expertos y políticos, con baja participación de empresarios, casi totalmente contraria a esta negociación, y sindical, mayoritariamente a favor. Hubo argumentos contrarios sobre productividad y empleo y favorables sobre salarios y competencia.
Análisis comparado
El documento «Sistemas de negociación colectiva ramal, sectorial o multinivel: un análisis comparado» pertenece a José Francisco Castro.
Analiza cinco dimensiones de los sistemas de negociación colectiva de España, Francia, Italia, Alemania, Argentina y Uruguay: ámbito de aplicación de los convenios colectivos, niveles de negociación, legitimación o representación de los actores, procedimiento de negociación y mecanismos de extensión, adhesión y exclusión del convenio.
Las principales conclusiones y aprendizajes son: la importancia de definir la legitimación y representación de los actores sociales para negociar; la necesidad de articular los niveles de negociación que puedan coexistir; la relevancia de mecanismos de extensión o ampliación de los convenios colectivos para aumentar la cobertura y la definición del rol estatal.
La mirada sindical
El documento «Perspectivas de la negociación colectiva ramal desde la mirada de las y los dirigentes sindicales», corresponde a Fernando Alvear, Carolina Díaz y Sebastian Osorio.
Analiza los conocimientos, opiniones y proyecciones de sindicalistas del Comercio, Manufactura, Transporte, Minería y Servicios financieros.
Los principales hallazgos muestran una disposición favorable hacia la negociación ramal, aunque con un dispar nivel de conocimiento. Se proyectan efectos positivos como el establecimiento de pisos mínimos sectoriales, el fortalecimiento sindical, una acción más eficaz y la superación de las restricciones de la negociación de empresa. Pero también se advierten amenazas como la oposición empresarial, resistencias del propio sindicalismo y el riesgo de que un eventual proyecto de ley se desvirtúe en su tramitación.
Entre los desafíos, se destaca el problema de la fragmentación sindical y la necesidad de unidad, la importancia de capacitar sobre la negociación ramal, y la necesidad de movilizarse para incidir en una eventual discusión legislativa.
Respecto de lo deseable se plantea que las materias a negociar deben ir más allá de lo salarial, que las organizaciones negociadoras deben ser las más representativas, que debería beneficiar incluso a los no sindicalizados, aunque con algunos reparo, y que el Estado debe tener un rol activo, existiendo distintas visiones sobre su nivel de involucramiento. Además, se identifica la dificultad para definir los límites sectoriales y el desafío de incorporar apropiadamente a las pymes.