Con un aporte positivo e importante para el bienestar de los niños, calificó la directora de la Residencia Pre escolares de Iquique, “Fundación Mi Casa”, Claudia Domínguez, quien recibió la entrega de los funcionarios de Gendarmería, que reunieron víveres, ropa, pañales, entre otros, actividad en marcada en el 94 aniversario institucional.
Para ello se concurrió hasta esa residencia que se encuentra en el sector sur de la ciudad y atiende a 32 niños y niñas, entre los siete meses a los 9 años de edad, pequeños que son vulnerables y requieren de un cuidado especial, comprobando que solo necesitan cariño, sin desmerecer el que entregan las funcionarias de ese establecimiento.
La delegación de Gendarmería fue encabezada por la directora regional subrogante, coronel, Nélida Troncoso, junto al jefe administrativo regional, suboficial, Nelson Bastidas, el jefe operativo regional, teniente, Álvaro Palominos, el coordinador regional de Bienestar Social y Calidad de Vida, asistente social, Raúl Sepúlveda, funcionarias y funcionarios penitenciarios.
En la oportunidad la coronel Nélida Troncoso, expresó que ese aporte fue una iniciativa de los propios componentes de la institución, quienes determinaron entregar esa donación a la residencia pre escolar de Iquique, por las necesidades que requieren, “estamos muy contentos de llegar hasta sus dependencias y destacar que esta fue una iniciativa de los propios funcionarios, de reunir los fondos para la compra de los implementos. Ello en el marco del 94 aniversario de nuestra institución”, dijo.
Mientras que la directora del centro, Claudia Domínguez, agradeció el aporte de Gendarmería, resaltando que toda ayuda es bienvenida para su institución, “todo lo que tenga que ver con el apoyo a los niños como alimentación, la higiene, la vestimenta, los juguetes, a la diversión de los niños, todo es un aporte positivo para el crecimiento y bienestar de ellos”.
Agregó que en la actualidad están enfocados a mejorar el tema de la vestimenta, la ropa interior, que es la que más se necesita, juguete acorde a la edad de los niños. Por ello se está mejorando en ese sentido para que todos puedan contar con un poquito de felicidad.
En el lugar los niños reciben cuidado, bienestar, contención emocional, protegen sus derechos. De los 32 niños hay algunos en proceso de adopción y otros ya están con su familia.
Del momento que el tribunal determina que el Centro debe cuidar a los menores, ellos quedan a cargo de la residencia. Posteriormente se realiza el despeje familiar a cargo de los profesionales y cuando existe familia se trabaja con ellos de acuerdo a la vulneración y se desarrollan habilidades parentales o ciertas situaciones que se deben mejorar en la familia. Allí hay opciones para devolverse a la familia y lo que se pretende en el tiempo de 3, 6 o 9 meses y se monitorea desde la residencia. Pueden estar con su familia y a la vez estar al cuidado de la fundación.