• El Consejo de Ministros para la Sustentabilidad y el Cambio Climático aprobó los instrumentos que permitirán al MOP avanzar en seguridad hídrica y construir infraestructura más resiliente para enfrentar los efectos adversos del cambio climático.
El Consejo de Ministros para la Sustentabilidad y el Cambio Climático aprobó los Planes Sectoriales de Cambio Climático a cargo del Ministerio de Obras Públicas: el Plan de Adaptación al Cambio Climático en Recursos Hídricos desarrollado por la Dirección General de Aguas (DGA) con apoyo de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y financiamiento del Fondo Verde del Clima, y el Plan de Adaptación y Mitigación al Cambio Climático Sector Infraestructura, elaborado por la Dirección General de Obras Públicas (DGOP), instrumentos de gestión clave para enfrentar los efectos adversos del cambio climático.
El Consejo estuvo conformado por la ministra del Medio Ambiente, Maisa Rojas, quien preside la instancia; la ministra de Obras Públicas, Jessica López; las máximas autoridades de las carteras de Agricultura, Esteban Valenzuela; Vivienda y Urbanismo, Carlos Montes; Economía, Nicolás Grau; Salud, Ximena Aguilera y el ministro (s) de Transporte, Jorge Daza. Luego de este pronunciamiento favorable, ambos Planes deberán seguir con su tramitación para comenzar con su implementación en 2025.
La ministra de Obras Públicas, Jessica López, destacó que “la elaboración de ambos planes demandó un gran esfuerzo de los equipos técnicos, ya que, por un lado, actualizamos las metodologías para reducir la vulnerabilidad de las obras públicas y el otro, el primero en su tipo, nos guiará para avanzar en seguridad hídrica con responsabilidad, equidad y sostenibilidad”.
En ese sentido, la representante de FAO en Chile, Eve Crowley, sostuvo que el Plan de Adaptación al Cambio Climático para el sector de los Recursos Hídricos “refuerza el compromiso de Chile con la seguridad hídrica y alimentaria, la resiliencia climática y la protección de los ecosistemas. La aprobación de este instrumento es clave para garantizar el derecho al agua, la sostenibilidad agrícola y el bienestar de las comunidades más vulnerables, integrando ciencia, justicia climática y gobernanza intersectorial”, indicó.
Por su parte, el director general de aguas del MOP, Rodrigo Sanhueza, resaltó que con el Plan de recursos hídricos el país avanza en gobernanza, al estar en sintonía con los Planes Estratégicos de Recursos Hídricos en Cuencas (PERHC) que está elaborando la DGA. “La reforma al Código de Aguas estableció que nuestras cuencas deben contar con estos planes, ya que son instrumentos de gestión de cambio climático y la priorización de las medidas se realizará a través de las Mesas Estratégicas de Recursos Hídricos para cada cuenca que se están conformando en el país”.
El director general de Obras Públicas, Boris Olguín, comentó que “la aprobación del Plan de Cambio Climático de Infraestructura y Edificación Pública, es un gran hito para el ministerio, la industria y el país, ya que permite avanzar en construir obras públicas resilientes que protejan los territorios y sus comunidades de los impactos del cambio climático, además de avanzar en la reducción de emisiones acorde a los compromisos de Chile en torno a la carbono-neutralidad”.
Medidas destacadas en recursos hídricos
El Plan de Adaptación al Cambio Climático en Recursos Hídricos (PACC-RH) incluye 5 objetivos, 10 medidas y 35 acciones dirigidas a avanzar en seguridad hídrica en el acceso al agua para consumo humano, preservar y conservar ecosistemas y promover actividades productivas sostenibles, junto con generar resiliencia frente a amenazas y eventos climáticos extremos. Además, incorpora criterios de interculturalidad, género y territorialidad, reflejando un compromiso con la justicia climática y la inclusión social.
El Plan fue desarrollado a lo largo de un año y medio, con la participación de más de 2500 personas y la colaboración de 12 ministerios, instituciones académicas, el sector privado y la sociedad civil, incluyendo representantes de los 11 pueblos indígenas y mujeres rurales, garantizando la representatividad y el enfoque inclusivo.
El Plan se complementa con los Planes Estratégicos de Recursos Hídricos en Cuencas (PERHC) que elabora la DGA para la gobernanza y gestión integrada de recursos hídricos en las cuencas del país, con las políticas y contribuciones de otras instituciones públicas y con el Plan de Adaptación y Mitigación al Cambio Climático Sector Infraestructura de la Dirección General de Obras Públicas del MOP.
Uno de los puntos esenciales del Plan es el avance en la mejora del acceso en cantidad y calidad de agua en las zonas rurales, a través de acciones asociadas a los Servicios Sanitarios Rurales, así como también en saneamiento rural, mediante pilotos de tecnología alternativa de tratamiento de agua servida. En conjunto con otras acciones, entre las que se integran las soluciones basadas en la naturaleza, se apunta a reducir la actual brecha en abastecimiento y saneamiento rural.
Además, se fortalecerán los sistemas de monitoreo hidrometeorológico mediante la ampliación y modernización de redes, se reducirán las pérdidas de agua potable en el sector sanitario junto con desarrollar nuevas fuentes de agua, como la desalinización, y otras tipologías a escala local o con tecnologías innovadoras, como la captación de aguas lluvias y los sistemas atrapanieblas. En el ámbito productivo, se promoverá la implementación de Acuerdos de Producción Limpia (APL), incentivando un uso más sostenible del recurso hídrico.
Infraestructura y Edificación Pública
El Plan de Adaptación y Mitigación al Cambio Climático Sector Infraestructura, fue un proceso largo, liderado por la DGOP, en el cual se realizaron más de 30 consultas ciudadanas en todo el país, con más de 1.100 participantes los que entregaron propuestas y observaciones que fueron evaluadas e incluidas en el Plan, además se trabajó con la academia, industria y otros órganos del Estado, para robustecer cada una de las iniciativas
El Plan fue construido en torno a 3 grandes objetivos: Adaptación, para contribuir a la resiliencia a lo largo del ciclo de vida de los proyectos; Mitigación, a través de un enfoque de circularidad y reducción de emisiones de gases efecto invernadero (GEI); y con Medios de Implementación, que buscan a través de la normativa y la gestión adecuada integrar el cambio climático en las obras y edificaciones públicas.
Cada uno de los objetivos se plasma en acciones concretas, como: diseño resiliente con proyecciones climáticas, certificaciones de sostenibilidad para edificios y obras, fortalecimiento de capacidades institucionales, con procesos participativos y enfoque de género, gestión de residuos post desastres, entre otras.