Una mezcla de alegría y ansiedad fue lo que marcó el retorno a clases en la comuna de Pozo Almonte. Un encuentro diferente con mascarilla, nuevos rostros y con medidas de seguridad en el contexto de pandemia.
Ingresos diferidos, aforos controlados por lista, autorización de los padres y apoderados en mano debidamente firmadas, protocolos de desinfección de manos, pediluvio, cambios de mascarilla, fila con distanciamiento físico son entre otras medidas parte de la nueva forma de volver a clases.
Samuel Díaz, jefe del Departamento de Educación manifestó que es importante entender que la Corporación como entidad sostenedora tiene la misión y obligación de entregar educación de acuerdo a las normas del Ministerio de Educación.
En tanto, hubo una cálida recepción con indicaciones de cómo debemos cuidarnos entre todos, que muy bien expresó el director de la Escuela Básica Pozo Almonte, Guillermo Manosalva.
También, los apoderados vivieron y manifestaron sus emociones junto a sus hijos, en su mayoría coincidieron en estar contentos por sus hijos.
Dentro de la primera jornada en los establecimientos educacionales, se realizó contención emocional a cargo de psicólogos, quienes con diversas técnicas guiaron a los estudiantes para este primer día de encuentro.